¡Cómo prevenir la aparición de várices!
Las varices son venas dilatadas y deformadas que aparecen cuando, por algún motivo, la sangre que llega a las piernas no puede volver al corazón. Te molestan por dos razones. La estética, ya que pueden tener un color rojizo (que son las arañas vasculares, característico de la fase inicial del problema) o incluso azuladas (en casos más avanzados), además de saltarse en algunos casos. La segunda razón son sus síntomas, que incluyen hinchazón y una sensación de malestar y cansancio en las piernas.
Las mujeres son las principales afectadas por el problema, y lo más común es que aparezca después de los 30 años. Parte de la explicación es que las hormonas femeninas, estrógeno y progesterona, dilatan y debilitan los vasos sanguíneos. Como resultado, las venas tienen mayor dificultad para bombear sangre al corazón, favoreciendo la aparición de varices. El embarazo también aumenta las posibilidades del problema, ya que el peso del feto afecta el flujo sanguíneo.
Tratamiento para la eliminación de las varices
Ingredientes necesarios:
- 5 dientes de ajo.
- 1 tallo de aloe vera.
- El zumo de 1 limón.
- 20 ml de aceite esencial de romero.
- ½ taza de aceite de oliva.
Método de preparación:
Para la correcta preparación de esta receta casera, debes pelar y lavar bien cada uno de estos ingredientes y luego mezclarlos, cortarlos en trozos pequeños para facilitar su disolución y hacerlos con la ayuda de tu batidora.
Déjalo en un frasco de vidrio durante 3 días en el refrigerador y aplícalo en la zona que sufre esta afección, hazlo todas las mañanas.
Otras alternativas naturales y efectivas que alivian los síntomas e incluso pueden prevenir la aparición de varices:
1- Insertar fibras en la dieta
El buen funcionamiento del intestino es un aliado en que el aumento de presión sobre las venas del abdomen, debido al estreñimiento e hinchazón, puede comprometer la circulación de las venas de las piernas. Agregue frutas como papaya, vegetales y semillas al menú. Si no funciona, los prebióticos y los probióticos pueden ayudar, siempre que estén bien guiados por médicos o nutricionistas.
2- Control de peso
“Las personas obesas tienen más probabilidades de desarrollar venas varicosas debido a la cantidad de volumen de sangre dentro de las venas que aumenta. Además, la grasa acumulada dentro de los vasos sanguíneos también conduce a una mala circulación. Además de las varices, otra complicación que puede surgir entre las personas obesas es la trombosis por el mal bombeo de sangre a todo el cuerpo, generando enfermedades ligadas al sistema vascular”. La obesidad y el sobrepeso aumentan la presión que se ejerce sobre los vasos y también favorecen la inflamación. Comer lo esencial, controlar la cantidad de azúcar, sodio y grasas debe ser parte de la vida de cualquier persona que quiera minimizar los síntomas o evitar las varices.
3- Siempre tomar agua
Se recomienda agua, jugos y tés para mejorar la circulación sanguínea. “Cuanto menor es la ingesta de agua, mayor es la viscosidad de la sangre. Además, la deshidratación también favorece una caída de la presión arterial, amenazando varios órganos. El consumo adecuado de agua asegura que el cuerpo esté regado y bien nutrido con sangre”, enfatiza. Por otro lado, manténgase alejado del alcohol: “Al promover la deshidratación, el alcohol puede hacer que el cuerpo retenga más líquidos y aumente la presión sobre las venas y arterias”, explica el médico.
4- La pierna necesita movimiento (y también descanso)
Trabajar sentado ocho horas al día (o más) aumenta el riesgo de muerte en un 10%, según un estudio publicado en la revista médica The Lancet. Y por cada ocho horas sentado, es necesario practicar una hora de actividad física para resistir los efectos negativos de este “sedentarismo”. “Pero para las personas con tendencia a los problemas vasculares, lo ideal también es introducir algunos hábitos para activar la circulación, como: realizar ejercicios moviendo los pies cada hora de trabajo sentado; levántate cada hora y camina para mover un poco las piernas”. En el caso de quienes trabajan de pie y permanecen en la misma posición durante periodos prolongados, lo ideal es tomar descansos para sentarse y levantar los pies.
5- Utilizar medias elásticas
Las medias de compresión, siempre que sean guiadas por el cirujano vascular, ayudan a mejorar el retorno venoso y están indicadas para quienes tienen varices, han tenido trombosis, mujeres embarazadas y en casos específicos.
6- Ejercita tu cuerpo
“La pantorrilla es el corazón de las piernas: con cada contracción muscular, bombeamos sangre y activamos nuestra circulación. Situaciones en las que esta musculatura se detiene durante mucho tiempo pueden provocar retención de líquidos en las piernas, provocando hinchazón, pesadez, piernas cansadas y aumentando la predisposición a desarrollar varices y trombosis venosa”. Y ni siquiera necesitas ser un deportista profesional, ya que los ejercicios de bajo impacto son beneficiosos, ya que la contracción de la musculatura en las caminatas por ejemplo, entre otros beneficios, aumenta la velocidad del flujo sanguíneo en las venas, mejorando el retorno de la sangre al corazón.
7- Cuida las hormonas y los anticonceptivos
La hormona de los anticonceptivos altera la circulación y aumenta el riesgo de formación de coágulos en las venas profundas de los músculos. “Siempre consulte a su médico de confianza y analice su anticonceptivo. Todo medicamento está sujeto a complicaciones y la decisión de sí el riesgo / beneficio de este medicamento vale la pena la toma entre usted y su médico”, advierte.
8- Di no al sol excesivo, la sauna y el agua caliente
El sol, la sauna y los baños de agua caliente hacen que la piel se caliente y que pase más sangre a través de los vasos de la piel. “Si pasa una mayor cantidad de sangre por los vasos superficiales, estos se acomodan a esta situación y se dilatan, siendo un factor que favorece la aparición de arañas vasculares en personas predispuestas”. La sequedad de la piel también puede provocar complicaciones como inflamación y úlceras.
Aquí te dejo unos tips extras por si llegaste a la parte final:
- Come saludable
- Haz ejercicio
- Toma duchas a presión
- Evita el calor excesivo
- Usa un calzado adecuado
- Masajea tus piernas
- Camina en puntillas
- Hidrata tu piel